Descartes consideraba que no podía haberse construido nada que fuera sólido sobre fundamentos tan poco firmes.
Descartes afirma que lo creado por Dios es lo real.
Descartes no creía en la ciencia y tan pronto como la edad le permitió salir de la sujeción de sus preceptores abandonó el estudio de las letras.
A partir de ahí recorrió el mundo para recoger diversas experiencias. Buscaba el aprender a no creer demasiado firmemente nada de lo que no hubiera quedado convencido y estudiarse también a si mismo.
Segunda parte
Descartes afirma que no hay tanta perfección en las obras formadas de varias piezas y hechas por mano de diversos maestros como en aquellas trabajar por uno solo y expone un ejemplo en el que lo explica.
Afirma que lo que Dios ha hecho él solo debe estar incomparablemente mejor regulado que todos los demás.
Afirma que en el mundo hay dos clases de espíritus: los que creyéndose más hábiles de lo que son no pueden dejar de precipitarse en sus juicios ni tener suficiente paciencia para dirigir con orden todos sus pensamientos y aquellos que teniendo suficiente razón o modestia para juzgar que son menos capaces de distinguir lo verdadero de lo falso que otros por quienes pueden ser instruidos, deben concentrarse conseguir las opiniones de estos otros antes que buscar por sí mismos las mejores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario